domingo, 25 de noviembre de 2012

Los hay que como sí de veras...



 

Tim Campbell, de cagle.com, 22 de junio del 2012

Es cagado como en verdad ante los ojos de la derecha gringa los mexicanos quedamos identificados con Speedy González, una rata toda acelerada que habitaba en Tijuana (no, nada que ver con Hank Rohn). Pero es una identificación del mecsican curious jodido... visto con agorrancia y un poco de "asquito" (como dirían por aquí)...
Pero peor aún, ese musulmán de la Casa Blanca los quiere tratar como humanos, de segunda, pero humanos...¡¡¡Qué desastre!!!
Tan negras se la ven los gringos con su mulato presidente que... ya en el colmo de los colmos quieren venirse a vivir acá entre los mecsicanitous, sirve que de paso nos domestican. 

¡Pamplinas!



Glenn Mccoy, New York Times, 15 de noviembre. (y he de reconocer que me recuerda a El día después de mañana)

jueves, 22 de noviembre de 2012

¡Viva el statu quo!*

¡Viva el statu quo!

Nada como cerrar la cortina y ver pixeles... 
¡Seguiremos informando!



El Fisgón, "Pa' vergüenzas", en La Jornada, 5 de septiembre del año dos mil.





* Se aplican restricciones.

martes, 20 de noviembre de 2012

Ya los veré en 5 años negando que bailaban eso...

De seguro ya lo vieron. De seguro más de una vez. De seguro al principio se resistieron porque Gramsci no dice nada respecto de como tratar con sudcoreanos alienados, pero después ya bien pedos andaban haciendo el baile del caballo. Es más, de seguro vieron no una, sino varias parodias sin importar lo malas que fueran. Después de un rato, seguro lo oían sin el video y consideraban la rola como algo providencialmente genial. 



¿¡Pero qué les pasa!? Entiendo el furor por rolas chiclopegajosas... pero me aterra pensar que en una década Oppan Gangman Style quede relegada a música de boda. Incluso siendo así no sería tanto mi temor como el saber que en ese tiempo, la rola será tan pero tan choteada que terminará sus días como la Macarena... todos la conocen, todos se la saben, todos la han bailado, pero a todos les da pena recordarlo.
El ascenso meteórico de PSY, creo, también le puede costar en términos de salud... de la noche a la mañana te conocen en lugares que no hablan tu idioma, hasta el secretario de la ONU, Britney Spears, el activista chino más visible bailan a tu son... ha de ser genial... pero en 3 años cuando nadie haya vuelto a oir nada como el oppa, la frustración de desaparecer y el desasosiego de aferrarse a la fama terminarán por hacer explotar la cabecita de Psy.
Por último... debo confesar que sí, sí me gusta la canción, el video, las parodias. Pero en esta época en que ya no se requiere del menor talento para ser archifamoso (e.g.  las Kardashian, Kawaghi, Paris Hilton) y en que incluso algo tan malo como el video "Friday" de Rebecca Black pueden ser considerados como fenómenos globales... hay que tener conciencia del bochorno que nos dará contarle a nuestros sucesores la frivolidad con que endiosábamos a granel a figurillas que no tenían más función vital que ganar nuestros likes.
Oppan Gangman Style fue tan abrumadoramente popular que pegó en todos lados y muchos moneros buscaron aplicar lo gracioso de Psy a sus comentarios políticos... hay más... pero me quedo con estos dos de Canadá y México. El video de Don Cheto pues se me hizo de las mejores parodias que topé (mucho mejor que la de Ai wei wei)


Eric Gable, The Globe and mail, Canadá, 8 de noviembre.


Polo Jasso, El Cerdotado, Milenio, 3 de noviembre.


viernes, 16 de noviembre de 2012

Para el registro de la profecía Morgan Freeman.

A diez días de la reelección de don Barack Obama... retomamos el ya conocido poster propagandístico y vemos cómo fue interpretado en distintas latitudes por distintos cerebelos. (Ja!, qué fraude publicitario gacho... sólo son un canadiense y tres chilangos)


Jenkins, The Globe and Mail,  Canadá, 5 de noviembre.


Perujo, "Con la mosca en la oreja", El Economista, martes 6 de noviembre.


Cartún Pérez, "We hope so", Milenio, 7 de noviembre.

}

Eduardo Salles, El espíritu de los cínicos, 7 de noviembre.

lunes, 12 de noviembre de 2012

Ayer y hoy



Erlich y Forges (España), El País, noviembre 8. 

Otro ejemplo de viñetas que seccionan temporalmente su espacio. Ayer pusimos ejemplos de cartones en que distintas épocas concluyen en el "hoy" (terminar en eloy suena gay). Ahora toca el básico "ayer" y "hoy". Considero además que se comprueba que estos cartones resaltan la ansiedad por el presente sin necesariamente dotar de una buena valoración al pasado.

domingo, 11 de noviembre de 2012

Al pasar de los años


Ben Sargent, New York Times, 9 de noviembre, 2012.

Me gustan esos cartones que buscan comparar distintas fechas en un solo panel. Me gustan más aún cuando en dos periódicos de países y continentes distintos coinciden los moneros en esta solución gráfica. Considero que en términos generales, este recurso resalta lo negativo del presente, la palabra "ansiedad" que usa Erlich, es la apropiada y la misma que aparece en los ojos de los personajes de la izquierda en el cartón de Sargent.
Sin embargo y aunque gráficamente ambas resalten la ansiedad del presente, los dos cartones abordan la ansiedad desde contextos harto distintos. Erlich, de España, ciertamente evade un comentario directamente político, sitúa la ansiedad en el desfase entre las generaciones y la tecnología y la dependencia a ella. La gente hoy vieja que vuelve a sentir esa desconfianza en los conocimientos propios cuando de halla frente a una computadora padece más ansiedad que aquella abuela con el gusto culposo por el azúcar o el otrora anciano que quedó anonadado por los patos en el estanque. Empero, el contexto de la crisis económica española debe estar presente. La huelga de trabajadores en el rotativo El País y la incertidumbre de dónde podrán encontrar los más veteranos en caso de aplicarse los recortes de personal, empapan la viñeta.
Por su parte, Sargent, sí establece el comentario político cuando señala que lo desconocido está cruzando el pasillo (del congreso), en las oficinas del partido opositor. Y el ansia que se siente es aquella de tratar con quien aun sin conocerle se sabe de antemano la rijosidad que habrá en el trato. El punto de partida, obviamente es la reelección de Obama, quien por momentos pareció que perdía la casa blanca  y quien mantuvo el senado pero no logró imponerse en la cámara baja. Esa ansiedad del "a ver qué pasa" que otros en la historia han sentido cuando dejan atrás el espacio seguro de lo conocido. 


Erlich, El país, 9 de noviembre.

viernes, 2 de noviembre de 2012

Viva la muerte!


En el tono de la filosofía del relajo, y a pesar de la pésima actuación de Tongolele, "Mátenme porque me muero" es una de las películas más divertidas que he visto. Chulada!(Lo chido chido de esta escena empieza al minuto 3, 18 segundos)